Llevábamos 2 días seguidos escalando en montaña y necesitábamos una vía asequible, equipada y que nos dejase dormir un poco más. Fuimos entre semana, ya que, según nos habían contado, es una de las vías más frecuentadas del Valle.
Desnivel y dificultad: 250 m, 6a+ (V/A0 oblig.).
Aperturistas: Luis Royo, Carlos Budria, Carlos Roy y Julio Benedé en 2010.
Material: 12 cintas express y material de reuniones.
Aproximación: desde el punto más alto de Formigal seguimos una pista en sentido Sallent, cruzando una valla metálica a los pocos metros. A la pista le sigue un pequeño sendero que se dirige al cordal característico y que da acceso a la vertiente este. En el mismo cordal, seguimos el sendero que se dirige al espolón de la «Valle de Tena», sin mayores complicaciones.
Via: vía muy variada que empieza por placas tumbadas con algún paso de adherencia. Poco a poco va cogiendo verticalidad y se escala a través de largos variados de con diedros, chimeneas y algún pequeño desplome, muy bonitos. El L7, el largo estrella de la vía, nos pareció duro y bastante técnico.
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