Echaba de menos volver a casa pensando en cual será la próxima baconada. Todo tiene su proceso, pero , con paciencia, un día te das cuenta que has dejado de prestar atención a tus dolores e incomodidades para, por fin, disfrutar de la escalada, el paisaje, tus colegas y lo feliz que eres así. Aunque ese proceso aún no ha acabado, Ranero será siempre recordado cómo un bonito punto de inflexión.
Maiatzak 14 es , según dicen, la vía ideal para iniciarse en esta pequeña meca de la escalada tradicional. Hacía tiempo que queríamos descubrir estas paredes, y , por fin, Boti, Julen y yo, nos ponemos de acuerdo para afrontar las 2 h de coche que nos separa de este solitario paraíso. Sin duda, mereció la pena!
Desnivel y dificultad: 190 m , 6a
Material: Pocos seguros en general. Doble cuerda 60m, Juego de friends hasta el 3, 12 cintas y algún cordino para lazar puentes de roca.
Aproximación: Aparcamos en el parking de las cuevas de pozalagua. Desde aquí, y detrás del bar, comienza una pista en dirección Ranero. Tras unos metros, cruzamos un cerco de ganado y nos dirigimos hacia la derecha, por terreno algo incierto, en busca de las paredes. Maiatzak 14 se encuentra en el segundo sector más cercano. 30 mins desde el coche.
Vía: El primer largo, algo deslucido por la vegetación, es el más sencillo de todos. El segundo nos pareció algo más peligroso, con algún bloque algo sospechoso. A partir de aquí, se suceden tramos verticales, continuos, de fisuras, diedros y pequeñas panzas de caliza impresionante y fácil de proteger. El lugar, el ambiente y la vía no recordó a la sensación de escalar en lugares como Ansó, rodeados de soledad y paisajes que nos regalan mucha calma.
Recordaremos, al menos un tiempo, los largos L3 y L4, ambos muy variados con bavaresas, diedros y fisuras que nos sacaron unas buenas sonrisas.
Descenso: Desde el punto más alto, tratar de localizar el collado desde el cual, ya veremos el lógico sendero que nos lleva de nuevo al coche. Track: https://www.strava.com/activities/10032347926
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